[Articulos Individuales de la edicion de Intersecciones de otoño de 2017 se publican en este blog cada semana. La edicion completa puede ser encontrada en MCC’s website.]
Si bien el reasentamiento de personas refugiadas en los Estados Unidos ha contado con el apoyo de muchos legisladores y comunidades desde hace mucho tiempo, en 2017 se han creado políticas dirigidas a limitar y disminuir las llegadas. Los esfuerzos de reasentamiento en los Estados Unidos involucran colaboraciones entre agencias gubernamentales, organizaciones sin fines de lucro conocidas como Voluntary Agency (o Volags) y comunidades. Las congregaciones y asociados religiosos han desempeñado un papel importante desde que los esfuerzos formales de reasentamiento de personas refugiadas comenzaron en 1975. Ahora, a pesar de que el reasentamiento de refugiados se ha convertido en un tema político candente, las iglesias continúan desempeñando un papel significativo en brindar la bienvenida, especialmente en términos de construir relaciones duraderas y servir como guías comunitarios para las personas recién llegadas de alrededor del mundo.
Desde sus inicios, el programa de refugiados de los Estados Unidos ha tenido el propósito de que los sectores público y privado se asociaran en la acogida e integración de las personas refugiadas. La Ley de Refugiados de 1980 formalizó estos esfuerzos de asociación para el reasentamiento de personas refugiadas, creando el Programa Federal de Reasentamiento de Refugiados. En la actualidad, nueve volags tienen contratos con el gobierno federal para acoger y ayudar a las personas refugiadas en sus transiciones iniciales a las comunidades de todo el país. Cada agencia administra sus oficinas locales en EE. UU., mientras que cada oficina interactúa estrechamente con la comunidad circundante. Cuando congregaciones como la Iglesia Menonita de Conestoga en Morgantown, Pensilvania, acoge a personas refugiadas, forman asociaciones con un Volag responsable de reasentar a las familias en su área. En Conestoga, el Volag fue mi empleador, el Servicio Mundial de Iglesias (CWS por sus siglas en inglés) de Lancaster, Pennsylvania.
En una tarde soleada de mayo de 2017, una casa en New Holland, Pennsylvania, tuvo una transformación especial. La casa de ladrillo, en la calle de una tienda de suministros de tractores, fue equipada para convertirse en el nuevo hogar de una familia congoleña. Mientras que el equipo de bienvenida de la Iglesia Menonita Conestoga trabajaba duro en la limpieza y organización de la casa en preparación para su llegada, la familia congoleña (madre, padre y sus cuatro hijos), todavía estaban esperando su vuelo de Tanzania a Nueva York.
Había pasado décadas desde que los miembros de la Iglesia Menonita Conestoga habían patrocinado a refugiados. A principios de 2016, la congregación comenzó conversaciones sobre la acogida de otra familia al este del condado de Lancaster. El pastor Bob Petersheim señala que “Conestoga tiene una larga historia de apoyo a la misión local y global… [Nosotros] tenemos profundamente en nuestro ADN congregacional las palabras de Jesús en Mateo 25 que declaran, ‘en cuanto lo hicieron a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicieron’”.
Conestoga formó un comité, recibió un curso de actualización en los cambios que se habían dado en el sistema desde su último patrocinio y comenzó el trabajo de prepararse para una familia. La participación del equipo de bienvenida ha brindado apoyo adicional al viaje de reasentamiento de la familia, proporcionando más ayuda a los esfuerzos de integración. La directora de casos de CWS, Alyssa Anderson, señala que “la estabilidad y apoyo que el equipo de la Iglesia Menonita Conestoga proporciona a la familia son cruciales. La familia sabe que tiene una comunidad que no sólo da la bienvenida, sino que la ama, y eso hace una gran diferencia”.
Algunas iglesias quieren ayudar con el reasentamiento de personas refugiadas, pero no viven dentro del rango de reasentamiento permitido de un Volag registrado. Sin una manera de patrocinar una familia de manera privada, estas comunidades están limitadas en su capacidad de extender la acogida. Una de estas comunidades que atraviesa actualmente por esta situación es Gainesville, Florida. Richard y Eve MacMaster, miembros de la Iglesia Menonita Emanuel, comenzaron a organizar esfuerzos interreligiosos y comunitarios con la expectativa de que brindar acogida a personas refugiadas a Gainesville sería la mayor parte de su trabajo. Pronto se dieron cuenta de que su iglesia está a 75 millas de la agencia de reasentamiento más cercana. Los esfuerzos de la congregación ahora han cambiado hacia la organización de
voluntariado y donaciones para ser enviadas a las personas recién llegadas en la ciudad de reasentamiento más cercana. Si se les diera la oportunidad de fundar una agencia de reasentamiento en Gainesville o de patrocinar una familia privadamente, los MacMasters dicen que “muy definitivamente” lo harían.
Un desafío adicional para el programa de reasentamiento de refugiados de EE. UU. es que el trabajo de las agencias de reasentamiento está ligado a la voluntad política de la nación. La cobertura de los medios de comunicación de la crisis siria ha aumentado el interés de la comunidad de hacer trabajo voluntario con las personas refugiadas, pero ha disminuido la voluntad política de financiar el programa y permitir que las familias lleguen. Independientemente del apoyo de la comunidad y dinero recaudado, las agencias se enfrentan ahora a ser incapaces de realizar el trabajo vital al que han sido
llamadas.
El apoyo de los grupos asociados de la comunidad y de la fe es invaluable para el trabajo de las agencias de reasentamiento en los Estados Unidos. Muchas veces, las relaciones establecidas en los primeros meses de transición duran toda la vida. Aunque este ha sido un año turbulento para el reasentamiento de personas refugiadas en EE. UU., congregaciones como la iglesia Menonita Conestoga y comunidades como Gainesville están demostrando que hay espacio para tener personas refugiadas e inmigrantes como vecinas en nuestras comunidades.
Christine Baer es desarrolladora de recursos congregacionales para la oficina del Servicio Mundial de Iglesias, en Lancaster Pensilvania
Aprende más
United States State Department Bureau of Population, Refugees and Migration: https://www.state.gov/j/prm/about/index.htm.
United States Department of Health and Human Services Office of Refugee Resettlement: https://www.acf.hhs.gov/orr.